El evento de colocación de la primera piedra en la Central de Abastos junto a Playalab provocó malestar entre funcionarios de Playa del Carmen
La visita del gobernador del estado de Quintana Roo, Carlos Joaquín González a Playa del Carmen para colocar la primera piedra de lo que será el Centro Logístico y Central de Abastos, evento programado para llevarse a cabo el día de ayer sábado 15 de enero se convirtió en un vulgar evento comercial cuando la empresa junto al laboratorio Playalab dispusieron que no permitirían la entrada a nadie si antes no se realizaban pruebas de laboratorio, por supuesto en sus instalaciones que ellos mismos dispusieron y por la suma de 250 pesos cada una.
Los primeros en rechazar la imposición fueron los medios de comunicación de la Riviera Maya quienes cancelaron su asistencia, más tarde se supo que el gobernador del estado de Quintana Roo no llegó a la cita debido a actividades de agenda, mientras tanto el regidor, ingeniero Marciano Toledo, lamentó que un evento oficial se privatizara de tal forma que nadie ingresaba si antes no pagaba 250 pesos por realizarse la prueba de laboratorio.
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“Es un insulto que estén haciendo negocio para entrar a un evento del municipio, están cobrando 250 pesos por prueba por evento, si hubieran avisado con tiempo lo haríamos con gusto. Yo me regresé porque no tenía efectivo. Con unos pesos se queman estoy yendo con Cristina ella está haciendo las pruebas gratis”, comentó el ingeniero Marciano “Chano” Toledo en el grupo de prensa de la regiduría.
Para construir se sabe que la Central de Abastos y Centro Logístico, devastaron una superficie de selva de 200 mil metros cuadrados, en donde edificarán 195 bodegas y 142 locales que serán vendidos o rentado en dólares preferentemente. Ni los cenotes, ni las palmas chit, ni los animales fueron considerados, pero sí una oficina corporativa y un Business Center, vialidades y estacionamiento con capacidad para 480 vehículos. Obra en donde apenas podrían generarse 250 empleos, de vigilancia y limpieza casi todos ellos.
