Trabajadores de la empresa Italian Coffe Company, ubicada en Playa del Carmen, realizaron el cierre temporal de las instalaciones del establecimiento, en demanda de que los propietarios del lugar les paguen correctamente sus salarios y les den las prestaciones que por derecho le corresponde a cada uno de ellos.
Al menos 13 de los empleados de la cafetería ubicada en el interior de una plaza comercial en Playa del Carmen, esperaron la llegada de la propietaria del local, Elizabeth Orlancino para exponerle sus quejas e inquietudes, principalmente en lo que respecta a la carencia de prestaciones de seguridad social como el Seguro Social y el Infonavit.
Trabajadores de la franquicia Italian Coffe Compañy en Playa del Carmen hicieron un paro de labores, debido a que muchso de ellos no cuentan con servicios de seguridad social ni cotizan en el Infonavit
Para impedir la apertura del negocio, los empleados inconformes utilizaron el propio mobiliario del establecimiento -sillas y mesas-, para impedir el acceso de los clientes al lugar y, exigieron que se les aclara el porqué es mayor la cantidad de recursos que reciben por el concepto de propinas, que los salarios que devengan.
“La mayoría de nosotros solo ganamos el salario mínimo, no tenemos más que un bono por propinas y en siete años no nos han otorgado el seguro social, pese a que lo hemos pedido”, se quejó una de las trabajadoras, a la que sin embargo se le aclaró que en su momento el contador de la compañía le explicará el porque el atraso en su inscripción al IMSS.
La propietaria del lugar, Elizabeth Orlancino se comprometió con los empleados a enviarles por mensajería sus registros ante el IMSS a cada uno de los trabajadores de la franquicia en Playa del Carmen.
Elizabeth Orlancino reconoció que hubo atrasos en algunas inscripciones ante el IMSS, debido a un problema con uno de los contadores, sin embargo, se comprometió a enviar vía mensajería, a cada uno de los empleados esta misma tarde, la copia de los registros ante el organismo de seguridad social de cada trabajador.
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La propietaria del lugar, hizo un llamado a los empleados a regresar a sus empleos sin ningún tipo de represalia y, sin el temor de que alguno de ellos pudiera ser despedidos de sus labores posteriormente o, en su defecto acudir ante las autoridades del trabajo, para que ante ellos se les pague lo que legalmente les corresponde.
Hasta pasado el mediodía de ayer los empleados no lograban ponerse de acuerdo entre ellos mismos sobre si regresar a laborar o, solicitar sus finiquitos de ley, ya que varias de las trabajadoras estaban en desacuerdo en ser despedidas, lo que dividió a los empleados de la franquicia.