Para nadie es un secreto que la delincuencia en Playa del Carmen es una realidad, tampoco que la policía de Solidaridad, Fiscalía, Guardia Nacional, Marina etc. está integrada por buenos elementos, pero también por malos, gente que opera para fuerzas oscuras y de intereses cuestionables.
Pero la forma simple de sustraer información para privilegiar a unos cuantos quedó en evidencia luego que el área de comunicación social de la Secretaría de Seguridad Pública se vio sorprendida por una fotografía de seis personas detenidas y una mesa con presunta droga que circularon desde temprana hora, antes que ellos mismos contaran con la imagen.
Durmiendo con el enemigo
Las propias filas de los uniformados están intervenidas, y la muestra es la filtración de esa fotografía porque pone en evidencia que si una foto puede salir sin cumplir los protocolos, entonces los datos como ubicaciones, patrullas, nombres, datos y hasta la información delicada como los nombres de los oficiales, puede salir con tanta facilidad como una fotografía.
Y es que lo que pareciera ser “peccata minuta” tiene un valor intrínseco mayor, es una alerta de lo que ocurre al interior de las filas policiacas porque entonces toda información puede “filtrarse” para responder a ciertos intereses.
El mensaje es esencia, lo que muestra la foto filtrada exhibe a seis personas detenidas, tres hombres y tres mujeres detrás de una veintena de paquetes de distintos tamaños sobre una mesa con presunta droga, supuestamente 90 kilos, flanqueados por un agente de la marina y dos de la policía de Solidaridad.
El mensaje es certero, una persona al interior de la policía, o de la Fiscalía, o de la Guardia Nacional o de la Marina tiene el poder de brincarse todas las corporaciones, todos los acuerdos, todos los protocolos y por lo tanto se juega con información delicada cuyas consecuencias casi recaen, en la Secretaría de Seguridad Pública.
“Unidos contra la delincuencia” pareciera que se quedó en un eslogan que no corresponde con la realidad.