El titular de la Auditoría Superior de Quintana Roo (Aseqroo), Manuel Palacios Herrera, incumple con su función al brindar protección al presidente municipal de Tulum, Marciano Dzul Caamal, quien luego de cuatro meses no ha podido solventar los más de 9 millones 710 mil pesos faltantes de la Cuenta Pública 2021.
En las auditorías forenses realizadas al municipio de Tulum que concluyeron el 31 de octubre de 2022, se detectó que los faltantes de dinero público se generaron entre octubre y diciembre de 2021, justo los tres primeros meses de la administración de Dzul Caamal, por lo que es él el responsable de la sangría provocada a la comuna.
Como se recordará, fue el mismo Manuel Palacios Herrera, quien explicó que las auditorías forenses es un paso posterior que se da en un proceso de fiscalización de la auditoría financiera, cuando se presume que hay desviación de recursos, fraude o corrupción en el mal uso de los recursos públicos. La propia ley lo señala y es cuando se enfocan a esos temas.
Es por ello que resulta vergonzoso y una decepción para la sociedad quintanarroense que no se hayan emprendido las acciones legales en contra del cuestionado alcalde que lejos de brindar estabilidad al municipio ha provocado una ola de desgobierno que afecta a la mayoría de empresarios, comerciantes, y sociedad en general.
A la fecha, la información disponible es que la Aseqroo informó que el presidente municipal de Tulum, Marciano Dzul Caamal, provocó un daño a la Hacienda Pública y al Patrimonio por un monto de 9 millones 710 mil 636 pesos.
Entre los principales faltantes de dinero público destacaron en los rubros de obras de pavimentación en diversas colonias del municipio, así como en la construcción de guarniciones, y ampliación, ampliación del cableado eléctrico, mantenimiento de la red de drenaje y agua potable solicitados por el municipio y no pagados a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA).
El Informe de Inversión Física de la Cuenta Pública 2021 reveló que se obtuvieron 86 observaciones de las cuales solo se solventaron seis antes del cierre de las auditorías el pasado mes de octubre de 2022, quedando pendiente de solventar ochenta, mismas que generaron 144 acciones sancionatorias y resarcitorias.
El documento de la Aseqroo revela ya ordenó al presidente municipal de Tulum, Marciano Dzul, para que restituya los recursos faltantes y sancionar a los funcionarios responsables de la sangría a las arcas municipales al presupuestar y no ejecutar obras públicas, dejar inconclusas otras y no pagar otro gran número de trabajos.
Entre los gastos no comprobados por el presidente municipal de Tulum, Marciano Dzul Caamal, destacan los supuestamente invertidos en Modernización de la Av. Cobá, Tramo: Av. Tulum-Bodega Aurrera; Construcción de guarniciones y banquetas en la Región 2 Y 3, de la localidad de Tulum; Construcción de guarniciones y banquetas en la colonia Tumben Ka, de la localidad de Tulum; Ampliación de la red eléctrica de la localidad de Francisco Uh May; y Red de drenaje sanitario de la colonia Ya’ax Tulum (Primera Etapa).
Además, no pudo justificar los gastos exorbitantes en la Ampliación de la red de agua potable en la comunidad de Cobá; Ampliación de la red de agua potable en la comunidad de Macario Gómez; Rehabilitación de vialidad en la Zona Costera (Av. Cobá-Arco Sian Ka’an); Electrificación y alumbrado público de la colonia Cristal, Ampliación del Centro de Salud (SESA), en la localidad de Chanchen Primero; entre muchas otras.
La Aseqroo explica que durante el proceso de licitación y previo a la asignación de contratos los funcionarios responsables no revisen los conceptos, ni las cantidades y mucho menos las unidades fueras los correctos, lo ocasionó cargos indebidos en las tarjetas de precios unitarios, así como durante la ejecución de los trabajos contratados. Es decir, que se alteraron los montos de contratos si justificación alguna.
Además, la Aseqroo detectó que fueron suspendidas diversas obras sin realizar la deducción contractual de acuerdo con lo estipulado en las cláusulas contractuales, con el fin de evitar pago indebido por penas convencionales.
También, revela que los funcionarios de Marciano Dzul autorizaron sin validación documento que integran el expediente técnico unitario de obra pública para mitigar el riesgo de errores humanos, provocados involuntariamente y que pudieran derivar en detrimento en la hacienda pública o en un daño patrimonial.
Asimismo, el órgano auditor aseguró que previo a la autorización de las estimaciones presentadas por el contratista para su pago, no revisaron y autorizadas por la residencia con el fin de comprobar que las cantidades plasmadas corresponden con las cuantías a pagar y disminuir el riesgo de pagos por volúmenes pagados en exceso; y se encuentren acompañadas de la documentación que acredite la procedencia de su pago.
Entre las ordenes que la Aseqroo emitió al presidente municipal, está también la de verificar que en las estimaciones a pagar y se considere la amortización del anticipo otorgado previamente a la ejecución de la obra.
Y también apegarse a las especificaciones técnicas de construcción, así como, toda aquella normatividad aplicable para la ejecución de las obras con el fin de disminuir el riesgo de la aparición de defectos o vicios ocultos en las obras.
Hay que aclarar que la Cuenta Pública 2021 la compartió con Víctor Mas Tah. Pero el colmo del cinismo es que durante su informe de 2021 Marciano Dzul Caamal presumió sus cuestionadas obras, mismas que compartió con su antecesor.
Los tulumeneses sufren de la corrupción e impunidad imperantes, y peor aún sin una autoridad que les ponga el alto a los malos funcionarios, encabezados por el presidente municipal Marciano Dzul Caamal, y familia.
Con información de Sol Quintana Roo
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