Con apenas un mes de nacido este pequeño ya aprobó la maldad de este mundo y de manos de quién menos debería: sus propios padres.
Un poco más de 30 días de nacimiento es el bebé fue rescatado por el Grupo Especializado de Atención a Violencia Familiar y de Género (GEAVIG).
Y es que los desarmados e inhumanos padres del menor intentaban por todos lados regalarlo, no sin antes provocarles severos daño a tan corta edad.
Lo más lamentable de este caso es que el recién nacido tenía lesiones en las manitas y en su cuello.
Lamentablemente, los hechos tuvieron lugar en la supermanzana 260 en la Colonia Prado Norte.
La denuncia la realizó una persona quien indicó cuando llegó a una tienda se le acercaron una pareja que llevaba un bebé recién nacido en los brazos y le ofreció regalarle al menor.
Tantas eran las ganas de la pareja por deshacerse del niño que incluso lo ofrecían con su certificado de nacimiento y la cartilla de vacunación.
La persona se negó a aceptar al bebé y muy tranquilos, los padres continuaron su camino con el bebé en brazos.
Posteriormente la persona contactó a elementos de la policía al llegar a un podían ver a la pareja caminando metros más adelante de la tienda en la que habían ofrecido el niño.
La policía logró interceptarlos, percatándose de que el bebé tenía huellas de violencia en su cuerpo. De la ayuda de una ambulancia para el menor, quedando este bajo el resguardo del Geavig, no mientras que los progenitores quedaron bajo resguardo de las autoridades y calidad de detenidos para ser puestos a disposición de las autoridades correspondientes.
En tanto, el pequeño fue entregado al DIF al bebé para su resguardo y cuidado.
Niños son rescatados por el Geavig en azotea de Paseos del Mar
Otro caso también de violencia infantil fue el del pasado 5 de febrero cuando Una llamada al 911 por parte de vecinos del fraccionamiento Paseos del Mar en Cancún, fue suficiente para que arribara personal del Geavig.
A decir de los vecinos, los cuatro menores de edad se quedan solos todo el día desde las 5 de la mañana que sus padres salen a trabajar.
Sin embargo, las largas jornadas de los progenitores de los menores de 7, 8, 9 y 10 años ha ocasionado que los niños brinquen de forma regular sobre las azoteas del edificio.
Lo anterior, pone en riesgo la integridad física de los infantes, quiénes presuntamente brincan de un departamento a otro en busca de apoyo de los vecinos.
Ahora, el Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (Geavig), procedió a rescatarlos, resguardándolos ante las instancias correspondientes y verificar la situación de los menores y sus padres.
