Tras las polémicas manifestaciones de Francisco Céspedes, reconocido cantautor cubano, en las que deseó la muerte al presidente de México, AMLO, se han generado diversas reacciones y consecuencias. El pasado 17 de junio, un video en el que Céspedes expresó estos deseos se volvió viral en las redes sociales, manifestando indignación y rechazo en gran parte de la población.
A pesar de tener programada una presentación en San Miguel de Allende, Guanajuato, el próximo 7 de julio, el alcalde de este municipio decidió cancelar su concierto. El ayuntamiento, en línea con la opinión de los habitantes, reprobó enérgicamente el comportamiento del cantante y excluyó sus palabras como un discurso de odio.
El alcalde priísta de San Miguel de Allende, Mauricio Trejo, anunció la cancelación del evento y destacó que nadie puede venir a desearle la muerte al presidente. Como resultado, se contratará a otro artista de mayor relevancia para ocupar el espacio del concierto cancelado.
Previamente, algunos ciudadanos del municipio habían declarado a Francisco Céspedes como persona “non grata” y habían convocado a una movilización pacífica para impedir su presentación. La decisión del gobierno municipal de cancelar el evento fue sostenido por el regidor Carlos Olvera, quien incluso redactó una carta solicitando que se tomaran medidas contra el cantautor.
Como Regidor del H. Ayuntamiento de #SanMigueldeAllende manifesté mi total inconformidad por las declaraciones del cantautor Francisco Céspedes entorno al Presidente Andrés Manuel López Obrador, que bueno que se ha optado por CANCELAR el evento. pic.twitter.com/lvnQXBbwnW
— Carlos Olvera Avila (@carlosolvera86) June 28, 2023
En una entrevista, Francisco Céspedes criticó al presidente AMLO ya su gobierno por invitar al presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, al Grito de Independencia de 2022. El cantautor cubano acusó a Díaz-Canel de ser un dictador y sentir que su invitación por parte de AMLO lo colocaba “por encima de todos”.
Esta situación ha generado un intenso debate en el país, en el que se confrontan la libertad de expresión y los límites del discurso público. Mientras algunos apoyan la cancelación del concierto como una respuesta contundente ante comentarios irrespetuosos y ofensivos, otros argumentan que se está coartando la libertad de expresión y que se debería permitir que el artista se presente, separando su vida personal de su carrera profesional.
En cualquier caso, este episodio ha dejado en evidencia las tensiones y polarizaciones existentes en la sociedad mexicana y la importancia de la responsabilidad y el respeto al ejercicio de la libertad de expresión.