La edad es simplemente un número, sin embargo, para muchas personas representa un factor significativo al buscar una pareja estable y formal. Hoy en día, es común que un hombre mantenga una relación con una mujer más joven sin que nadie cuestione la diferencia de edad. Sin embargo, cuando la situación es inversa, suele ser objeto de críticas. Desde tiempos remotos, expertos han explorado durante años el fenómeno del amor y los diversos debates que surgen en torno a la disparidad de edad entre individuos.
En esta línea, un estudio llevado a cabo por la Universidad Emory en Atlanta, EE.UU. UU., ha desvelado la fórmula que subyace detrás de la aparentemente ideal diferencia de edad en una relación romántica. Después de examinar a más de 3 mil personas, han llegado a conclusiones inesperadas. Es importante señalar que, aunque esta investigación está respaldada por científicos y especialistas en el campo, son únicamente estimaciones generales del comportamiento en las relaciones, sin reglas rígidas.
Según los resultados del estudio, las parejas con solo un año de diferencia tienen una escasa probabilidad del 3 por ciento de separarse, mientras que aquellas con una diferencia de edad de una década experimentan una probabilidad de separación del 39 por ciento, la cual aumenta elevadamente. al 95 por ciento en el caso de parejas con dos décadas de diferencia. En resumen, a medida que la brecha de edad crece, también lo hace la probabilidad de que la relación termine.
Esto se atribuye al hecho de que cuanto menor es la diferencia de edad, es más probable que la pareja comparta una comprensión mutua debido a que pertenecen a la misma generación, compartiendo así un contexto social y cultural. Por otro lado, aquellos con una mayor diferencia de edad probablemente tengan más discrepancias en términos de ideología, contexto y experiencias vividas. Es importante destacar que, para que una relación sea saludable y exitosa, se requiere reciprocidad, comunicación efectiva, cariño y la capacidad de lidiar con posibles desacuerdos.
Es fundamental tener en cuenta que estos resultados de investigación son estadísticas promedio y no representan valores absolutos. Existen numerosos casos de relaciones satisfactorias y plenas con diferencias significativas de edad, incluso más exitosas que aquellas con una diferencia de uno o dos años.
En esta misma línea, la mayoría de las personas se han preguntado en algún momento de su vida si encontrarán a alguien con quien compartir el resto de su vida. Algunos llegan a sentir tristeza por estar solteros a cierta edad, temiendo que nunca encontrarán el amor. Científicos, matemáticos y psicólogos han colaborado para explorar las edades en las que Cupido podría hacer su entrada triunfal.
La matemática británica Hannah Fry lideró un estudio en la University College de Londres (UCL) que reveló las edades aproximadas en las que una persona podría encontrar al amor de su vida. Utilizando la Teoría de la Parada Óptima, concluyeron que el amor verdadero tiende a aparecer alrededor del 37 por ciento de las citas, lo que generalmente ocurre entre los 27 y 35 años.
Con información del Heraldo de México