En otro lamentable episodio de violencia en el aeropuerto internacional de Cancún, operadores de transportes turísticos protagonizaron una nueva batalla campal.
Recientes videos compartidos en redes sociales capturaron el momento en que dos transportistas se enfrascaron en una acalorada discusión que rápidamente escaló a golpes.
Este incidente, que es solo el último de una serie de enfrentamientos similares, se desencadenó nuevamente por la disputa de pasajeros entre los choferes. La situación llegó a tal punto que la intervención de la Guardia Nacional fue necesaria para separar a los ‘protagonistas’.
El aeropuerto, que debería ser un lugar de bienvenida para los turistas, se ha convertido tristemente en un escenario recurrente para estas peleas entre operadores de Touroperadores y taxistas Uber, quienes compiten ferozmente por atender a los visitantes que llegan a Cancún.
A pesar del espectáculo vergonzoso que ofrecieron a la vista de todos, los responsables de esta violenta confrontación no enfrentaron ninguna consecuencia por sus acciones.
Esta impunidad pone de manifiesto la inacción de las autoridades, quienes son plenamente conscientes de la situación pero parecen incapaces de tomar medidas efectivas para detener estos incidentes preocupantes.
