La actriz Melissa Barrera, de 33 años, fue abruptamente despedida de la producción de Scream 7 para expresar su solidaridad con Palestina ante los ataques de Israel. La productora Spyglass optó por un despido “silencioso”, generando indignación en redes sociales y el respaldo de colegas como Jenna Ortega, de 21 años.
El despido de Barrera ha desencadenado un movimiento en redes sociales, comparando su caso con situaciones de actores blancos como Ezra Miller y Noah Schnapp, quienes no fueron sancionados por actos controvertidos relacionados con la guerra. Surgieron acusaciones de racismo y discriminación de género en la industria de Hollywood.
Jenna Ortega expresa su apoyo a Melissa Barrera
A pesar de la ola de apoyo hacia Barrera, Jenna Ortega no regresará a Scream 7, oficialmente por “problemas de agenda” con otra serie. Sin embargo, informes sugieren que Ortega habría tomado esta decisión en protesta por el despido injustificado de Barrera.
"noah schnapp":
Por quienes comparan la situación entre el actor, que ha hecho comentarios pro-Israel y sigue contratado en Stranger Things, con la actriz Melissa Barrera, que ha hecho comentarios pro-Palestina y perdió su trabajo en Scream VII. https://t.co/ikrKmS15q8 pic.twitter.com/PDZdDc8J12— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) November 21, 2023
La situación se intensifica con el despido de Susan Sarandon, de 77 años, quien también expresó su apoyo a Palestina. Fue despedida de su agencia de talentos, UTA, para participar en una manifestación pro Palestina.
Las redes sociales exigen justicia para Barrera y Sarandon, destacando la amenaza a la libertad de expresión en la industria cinematográfica.
Despedimos a Melissa Barrera por pedir un alto al fuego, pero Noah Schnapp puede seguir feliz haciendo stickers sobre cómo la guerra es “sexy” y seguir teniendo trabajo. pic.twitter.com/T2eUf2jWQ4
— MacbethBath&Beyond (@iv_moony) November 22, 2023
Injusticia por parte de la producción, recriminan internautas
Tras lo ocurrido, las críticas hacia la producción no se han hecho esperar, ya que internautas señalan un posible caso de racismo en el despido de Melissa Barrera, una latina, en comparación con Noah Schnapp, quien, siendo blanco, no recibió castigo significativo después de bromear sobre la guerra. La disparidad en las repercusiones ha avivado el debate sobre la equidad en la industria cinematográfica.
