Un grupo de organizaciones de protección animal, encabezado por Empty the Tanks México y Conservación de Mamíferos Marinos de México (COMARINO), ha enviado una carta a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y a diversas autoridades federales y estatales para exigir la clausura definitiva de los delfinarios en hoteles y parques temáticos. Además, solicitan la modificación de la Ley General de Vida Silvestre para prohibir la tenencia de delfines en albercas de concreto, promoviendo su traslado a hábitats más adecuados.
El documento, respaldado por argumentos científicos, legales y éticos, alerta sobre el sufrimiento y la explotación sistemática de delfines y lobos marinos en México. La reciente viralización de un video donde se observa a un delfín golpeándose contra una plataforma de concreto en el delfinario del Hotel Barceló, en Quintana Roo, ha intensificado las críticas hacia estos establecimientos. Hasta el momento, no se ha informado sobre el estado de salud del cetáceo afectado.
Maltrato y ocultamiento de información
Según información obtenida a través de la Plataforma Nacional de Transparencia (folio 0001600228121), delfines en cautiverio han muerto por fracturas, asfixia, infecciones y otras afecciones derivadas del estrés crónico y la negligencia. Además, desde 2018, las principales empresas de la industria, Dolphin Discovery y Dolphinaris, han clasificado como “secreto industrial y comercial” la información sobre la reproducción y condiciones de vida de los delfines en cautiverio, bloqueando el acceso a datos sobre su población y estado de salud.
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Riesgos para humanos y animales
Más allá del maltrato animal, el “nado con delfines” también representa un riesgo sanitario para los turistas, quienes pueden estar expuestos a enfermedades zoonóticas transmitidas por el agua, las heces y la respiración de los cetáceos. También se han registrado casos de mordidas y agresiones a humanos, producto del estrés y el comportamiento alterado de los delfines en confinamiento.
Exigen medidas urgentes
Las organizaciones firmantes demandan:
- Prohibir la tenencia de delfines en albercas de concreto en hoteles y parques temáticos, impulsando su traslado a corrales marinos.
- Investigar lo sucedido en el delfinario del Hotel Barceló, sancionar a los responsables y reubicar a los delfines afectados.
- Realizar inspecciones en todos los delfinarios para garantizar el bienestar de los cetáceos y prohibir el contacto físico invasivo con turistas.
- Revocar el “secreto industrial y comercial” que impide la transparencia sobre la situación de los delfines en cautiverio en México.
En 2018, la Ciudad de México prohibió la tenencia de delfines en estanques de concreto, marcando un precedente que las organizaciones buscan replicar a nivel nacional.
