Ingrid Coronado, reconocida figura de la televisión mexicana, ha iniciado una nueva etapa en su vida personal tras una década dedicada a su bienestar y al cuidado de sus hijos. Después de años de soltería, decidió abrirse nuevamente al amor, y su relación con Germán Bricio, empresario y conferencista, ha marcado un giro positivo en su vida.
Recientemente, Ingrid compartió su felicidad por un viaje especial al Mar de Cortés, en Baja California, donde disfrutó junto a Germán y sus hijos. En sus palabras, fue una experiencia inolvidable, marcada por la majestuosidad de la naturaleza. Uno de los momentos más impactantes del viaje fue el avistamiento de un grupo de aproximadamente 50 delfines que los acompañaron en las cristalinas aguas. “El espectáculo de la naturaleza es fuera de este mundo”, expresó emocionada, destacando también la magia del plancton luminoso que transforma el mar en un escenario único.Para Ingrid, este viaje representó más que un momento de descanso.
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Fue una oportunidad para fortalecer los lazos familiares y disfrutar de la compañía de quienes más ama. “Estar con mis personas favoritas en un lugar tan hermoso hizo que todo fuera perfecto”, afirmó.
La relación entre sus hijos y Germán también ha evolucionado de manera positiva. Según Ingrid, sus hijos, quienes deseaban verla feliz en una nueva relación, han recibido con entusiasmo la presencia de Germán en sus vidas. “Es súper lindo con ellos, nos invitó a todos al viaje. ¿Qué más puedo pedir?”, compartió con alegría.
Tras superar desafíos personales, Ingrid Coronado demuestra que la felicidad y el amor pueden llegar en el momento adecuado, cuando uno está en paz consigo mismo. Su historia es un recordatorio de que siempre es posible construir una vida plena, rodeada de amor y de experiencias significativas.