El gobierno de Perú anunció este lunes su decisión de romper relaciones diplomáticas con México, luego de que le otorgara asilo a Betssy Chávez Chino, ex primera ministra del ex mandatario izquierdista, procesada junto a él por el fallido autogolpe de Estado de diciembre de 2022.
“Hoy hemos conocido con sorpresa y profundo pesar que la ex primera ministra (…) está siendo asilada en la residencia de la embajada de México en Perú”, dijo este lunes el canciller peruano, Hugo de Zela, al anunciar la medida en una conferencia de prensa.
Durante la noche de ayer, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) respondió en un comunicado que esa determinación “unilateral” es “excesiva y desproporcionada frente a un acto legítimo de México y apegado a derecho internacional, que en modo alguno constituye una intervención en los asuntos internos de Perú”.

“México reafirma, como ha sido reconocido por la Asamblea General de la ONU, que el otorgamiento de asilo no puede ser considerado un acto inamistoso por ningún otro Estado”.
Por su parte, el canciller peruano Hugo de Zela Lamentó la “equivocada e inaceptable posición que ha llegado al punto de obligarnos a romper con un país con el que, hasta antes de esos hechos, teníamos una relación fraternal y múltiples coincidencias”.
Asimismo, mencionó que este rompimiento diplomático no significa una ruptura “consular”, por lo que “nuestros compatriotas en México continuarán bajo la protección de nuestro cónsul en ese país” y viceversa.
También descartó el ingreso por la fuerza a la embajada de México en Lima para detener a Chávez Chino como ocurrió el año pasado en la sede en Quito con el ex vicepresidente Jorge Glas.
“Esa posibilidad no existe. Perú es respetuoso del derecho internacional y una acción de ese tipo no está prevista en ninguna norma”, expresó.

Cabe recordar que desde septiembre pasado, la ex ministra Chávez Chino está siendo procesada por su presunta participación en el fallido intento de golpe de Estado de Castillo; la fiscalía pide 25 años de cárcel para ella.
La ruptura de relaciones diplomáticas es una de las medidas de política exterior más importantes adoptadas por el gobierno del nuevo presidente de Perú, José Jerí, quien asumió las riendas del país hace pocas semanas, tras la destitución de Dina Boluarte.
Con información de Reuters






