La disputa por la candidatura de Morena a la gubernatura de Zacatecas exhibe una grieta en uno de los clanes políticos más influyentes del estado: los Monreal.
Este jueves, Ricardo Monreal, coordinador de los diputados federales de Morena, pidió a su hermano Saúl “serenarse” tras anunciar que desafiará las reglas del partido para contender por la gubernatura, a pesar de la reciente reforma contra el nepotismo.
Ricardo descartó cualquier ruptura, asegurando que “no va a haber división, ni política ni familiar”, y recordó que sus 14 hermanos siempre han caminado juntos bajo la misma bandera partidista. Sin embargo, las declaraciones contrastan con el abierto desafío de Saúl, que busca convertirse en el candidato pese a las restricciones legales y a la resistencia de una parte del movimiento.
La pugna refleja las tensiones que atraviesa Morena a nivel nacional: las ambiciones personales, los cuestionamientos a la unidad interna y el desgaste de las familias políticas que dominan los estados. En Zacatecas, los Monreal ya gobernaron y ahora se enfrentan a un dilema que pone en entredicho la coherencia del partido y la disciplina de sus militantes.
