El gobierno de México anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Ecuador, luego de que policías de ese país irrumpieran en la embajada mexicana para detener a Jorge David Glas Espinel, exvicepresidente ecuatoriano, quien desde diciembre de 2023 se encontraba refugiado en suelo mexicano.
La mañana de ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la decisión de dar asilo político a Glas, acusado por presuntos actos de corrupción. En respuesta, la Cancillería ecuatoriana aseguró que el asilo político otorgado constituía un acto ilícito.
Por la noche, elementos de la policía del país sudamericano entraron por la fuerza a la embajada de México y detuvieron a Glas, agrediendo, de paso, a Roberto Canseco, quien quedó al frente de la embajada luego de que Raquel Serur Smeke fuera declarada persona non grata.
Mediante un comunicado, la presidencia de Ecuador aseguró que se procedió a la captura de Glas luego de que la embajada mexicana “abusara” de la inmunidad y privilegios otorgados como misión diplomática, al conceder un asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional.
El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró el hecho como “una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México”, e instruyó a la Cancillería a declarar la suspensión de relaciones diplomáticas con Ecuador.
“Ante la flagrante violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y las lesiones sufridas por el personal diplomático mexicano en Ecuador, México anuncia el inmediato rompimiento de relaciones diplomáticas”, informó posteriormente Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores.
Ayer, el gobierno de México otorgó el asilo político a Jorge Glas Espinel, exvicepresidente de Ecuador durante el gobierno de
Rafael Correa (2007-2017) y quien desde diciembre de 2023 se encontraba refugiado en la embajada mexicana en Quito luego de que se girara una orden de aprehensión en su contra por corrupción.
La Secretaría de Relaciones Exteriores dio a conocer ayer que tras realizar un “análisis exhaustivo” de la solicitud del político ecuatoriano y de la información recibida, el gobierno mexicano decidió otorgarle el asilo político.
Asimismo, la Cancillería informó que junto con la notificación al gobierno de Daniel Noboa se mandaría la solicitud para que se le conceda a Glas el salvoconducto respectivo de conformidad con la Convención de Asilo Diplomático de 1954, del cual ambos países son parte y por lo que Ecuador está “obligado a dar inmediatamente el correspondiente salvoconducto”.
Sin embargo, la Cancillería ecuatoriana respondió que el asilo político otorgado por México a Glas constituía “un acto ilícito del Estado que concede, apoya una evasión a la justicia del Estado ecuatoriano y promueve la impunidad”.
En consecuencia, indicó la dependencia “Ecuador reitera que no otorgará el salvoconducto alguno, ya que no procede en el marco” de las convenciones contra la corrupción de la ONU de 2002 y la Interamericana de 1996.
En este contexto, el presidente López Obrador informó también que ayer mismo enviaría un avión de la Fuerza Aérea Mexicana para repatriar a la embajadora de México en Ecuador, Raquel Serur Smeke, quien fue declarada persona non grata en el país sudamericano.
Las tensiones entre ambos países se agudizaron a el pasado miércoles, cuando el mandatario mexicano expresó que el magnicidio del candidato ecuatoriano Fernando Villavicencio, en agosto de 2023, hizo que cayera la intención de voto de Luisa González, candidata correísta que lideraba las encuestas rumbo a la presidencia.
Ella “queda después de este asesinato como sospechosa, sigue haciendo campaña en circunstancias, considero, muy difíciles porque imagínense a todos los medios, pero ella sigue”, dijo el mandatario.
Un grupo de policías de Ecuador irrumpió a la fuerza el viernes en la embajada de México en Quito, en donde se encuentra el exvicepresidente Jorge Glas, horas después de que el gobierno mexicano le concediera asilo político horas antes en medio de tensiones diplomáticas entre ambos países.
Los policías, que llegaron en vehículos negros, rompieron las puertas externas de la sede diplomática mexicana en el norte de la capital ecuatoriana y accedieron a los patios.
No está claro si también ingresaron al interior de la casona ni la situación del exvicepresidente Glas. Uniformados cerraron la principal avenida de acceso a ese sitio.
El viernes la embajada de México en Quito lucía con fuerte custodia policial. Un día antes, la tensión entre los dos países escaló después de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, hiciera unas declaraciones que Ecuador consideró «muy desafortunadas» sobre las últimas elecciones en las que ganó el mandatario ecuatoriano Daniel Noboa.
Como reacción, el gobierno ecuatoriano declaró persona non grata a la embajador de México.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acusó este viernes al Gobierno de Ecuador de «exceso de uso de fuerza» y «prepotencia» porque la Policía Nacional del país sudamericano rodeó la Embajada de México en Quito tras ordenarse la expulsión de su titular, Raquel Serur.
«Vi el exceso de uso de fuerza rodeando la embajada, con mucha prepotencia, pero así son los fachos», declaró el mandatario en su conferencia matutina.
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