La tragedia de Aitana, al quedar prensada en un elevador del Hospital No 18 del IMSS en Solidaridad marcó a su familia y a la ciudadanía en general.
Trágicamente, el nombre de Aitana quedará grabado en la memoria de quienes conocieron su historia. A sus seis años de edad, esta pequeña vivió una corta, pero significativa vida que se vio truncada en un desafortunado accidente en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Solidaridad, Quintana Roo.
Aitana vivía y estudiaba en el municipio de Tinum, Yucatán. Después de su muerte, la escuela le entregó la boleta de sus calificaciones del primer grado -el único que cursó- a su familia. Los fines de semana viajaba, junto con su madre, a Playa del Carmen, Quintana Roo, en donde trabajaba su papá Patricio. La distancia es apenas de 2 horas en auto.
Por este motivo, luego del lamentable deceso de Aitana, quien fue víctima de un fatídico accidente cuando era trasladada en un elevador del IMSS, se informó que se haría un memorial en honor a la pequeña de 6 años.
La menor, Aitana Betzabé Domínguez Castillo, era alegre y “la luz de la casa”, de acuerdo con familiares, era una buena estudiante, tenía amigos en su escuela y con ellos jugaba a ser maestra, contó su abuelo Fraín a medios durante el sepulcro ubicado en el municipio de Tinum, Yucatán
Al respecto, Betsaida Domínguez hermana de la víctima, la recuerda siempre jugando y corriendo en su casa, además recuerda que Aitana “era la luz de la casa” y el motivo de las reuniones familiares.
Por este motivo y a fin de honrar la alegría de Aitana, en su memoria se construyó un parque con jardín y una fuente frente al mismo hospital del IMSS en Solidaridad con el objetivo de honrar su muerte. Y a la vez recordarle a la ciudadanía que tras esta tragedia, se destapó una serie de omisiones en el mantenimiento en varios hospitales de México.
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