Los cuatros niños y sus mamás, llegaron este jueves provenientes de la Ciudad de México.
CANCÚN: .- Los niños con diagnóstico de leucemia llegaron de la CDMX a disfrutar del mar, el agua color turquesa llamó su atención y no podían esperar más corrieron a ponerse el traje de baño para al fin cumplir el sueño de estar en la playa de Cancún.
Durante los cinco siguientes días, los doctores, hospitales, agujas, quimioterapias y consultas médicas van a estar fuera de la agenda de los cuatro guerreros diagnosticados con leucemia, en ese tiempo disfrutarán de ser niños y del deseo que al fin cumplieron.
Para Lupita es la primera vez que está en el mar, era la más ansiosa por dejar las maletas y correr al agua, cuando al fin estuvo parada en la arena y el agua mojaba sus pies, tomó de la mano a su mamá y sonriendo se introdujo lentamente y con precaución al mar. No pasó mucho tiempo para atreverse a soltar la mano de su madre y tomar arena para aventarla a sus amigos; hacer castillos está en sus planes. La niña, a diferencia de sus compañeros, no ha sido dado de alta, continúa en tratamiento y eso puso en riesgo el cumplir su sueño, pues el médico avaló su viaje dos días
antes de salir rumbo a Cancún.
El sol empezó a ocultarse y la brisa marina los hacía tiritar, aun así querían seguir dentro del agua, hasta que el hambre pudo más que sus ganas de jugar y con la promesa de sus mamás de llevarlos al otro día a la playa, aceptaron ir a
cambiarse para cenar. Los cuatros niños y sus mamás, junto con personal de la Fundación Doctor Sonrisas llegaron este jueves provenientes de la Ciudad de México.
Con información de Novedades Quintana Roo.