Opinión de Gregorio Valdés: Blanca Merari y el amiguismo desaforado en Puerto Morelos

Esta trama trama de nepotismo tiene sus raíces en las oficinas de la presidencia municipal encabezada por Blanca Merari Tziu Muñoz militante del Partido Verde Ecologista de México (PVEM). esto a raíz de que documentos y testimonios de empleados han revelado esta extensa red de parientes de funcionarios del municipio de Puerto Morelos que han encontrado acogida en la nómina municipal, dejando de manifiesto un trama de corrupción que destaca la participación del secretario particular de Blanca Merari, Abraham Masegosa Raña.

Cabe mencionar que este favoritismo inicia en la presidencia municipal a cargo de Blanca Merari Tziu Muñoz, quien ha incluido a su hermana, Nancy Gabriela Tziu Muñoz, en la nómina municipal como Asistente en la Dirección de Ingresos, percibiendo un salario bruto mensual de 17,487 pesos.

Derivado de lo anterior, el secretario particular y compadre de Blanca Merari, Abraham Masegosa Raña, quien recibe un salario bruto mensual de 41,122 pesos, ha logrado también incorporar a su hermano Álvaro, quien ostenta el cargo de Director de Recursos Materiales y Suministros, percibiendo mensualmente 25,139 pesos y supervisando todas las compras municipales.

Sin embargo, la lista de familiares en la nómina municipal continúa pues Abraham Masegosa Raña ha logrado la contratación de su amigo Santos Julián Medina Cab, quien se desempeña como Director de Recursos Humanos, con un salario mensual de 25,140 pesos, quien además tiene a sus hermanas en la nómina:

• María Oliva Medina Cab, Directora General de Participación Ciudadana, con un salario de 32,985 pesos.
• Mónica Mariela Medina Cab, Coordinadora Operativa en la Dirección de Ingresos, con un salario de 17,475 pesos.

Asimismo, más allá de las oficinas de la alcaldesa Blanca Merari, se encuentra el área de compras, en donde trabaja Marcelino Chulim Cámara, persona de confianza de Abraham Masegosa, quien tiene a sus hijos en la nómina:

• Jordi Jalil Chulim Vargas, Coordinador Municipal de Protección Civil, con un salario bruto mensual de 22,564 pesos.
• David Israel Chulim Vargas, empleado de Tesorería, con un salario mensual de 17,475 pesos.

Por otro lado, en la Secretaría Municipal de Desarrollo Humano en donde el secretario, Marco Antonio Betancourt Canul, ha colocado a prácticamente toda su familia en la nómina:

• Ana Luisa Betancourt Canul, Directora General de Desarrollo Social, ex regidora, con un salario bruto de 32,985 pesos.
• Mara Surlema Betancourt Pech, Directora de Organización Comunitaria, con un salario de 25,140 pesos.
• Jairo Elian Botes Betancourt, Director de Turismo Social y Comunitario, con un salario bruto mensual de 25,140 pesos.
• Laydy Soralla Betancourt Canul, Coordinadora Administrativa, con un salario de 19,683 pesos.
• Carlos Armin Betancourt Canul, Coordinador General, con un salario de 17,475 pesos.
• Víctor Betancourt Canul, Asistente Administrativo en la Dirección General de Cultura y las Artes, con un salario bruto mensual de 19,683 pesos.

También, se ha detectado que en la Secretaría Municipal de Desarrollo Humano, donde Mario Humberto Alvarado Villareal ocupa el cargo de Director General de Educación, con un salario de 32,985 pesos, y tiene a dos hijos trabajando:

• Yamili Rubí Alvarado Crespo, con un salario de 22,564 pesos, trabaja en la Coordinación de Asesores, dependiente de la Presidenta Municipal y además es presidente municipal suplente.
• Pablo Nicolás Alvarado Crespo, empleado de la Secretaría de Desarrollo Social, con un salario de 22,564 pesos.

Y esta trama se extiende hasta la Dirección de Fiscalización del Municipio, donde el director, Antonio Domínguez Olán, con un salario de 25,139 pesos, tiene a su hijo, Félix Antonio Domínguez Chacón, como Auxiliar administrativo, con un salario de 12,390 pesos.

Además de eso, Félix Antonio Domínguez Chacón está casado con Juana María Chacón, quien tiene un salario de 17,487 pesos y trabajó como regidora y Secretaria de Desarrollo Social en la administración anterior.

De igual manera, la presencia de familiares también esta presente en la Dirección General de Movilidad, donde el director, Manuel Dionisio Rodríguez Acosta, con un salario de 32,985 pesos, tiene a su hija, Aimé Regina Rodríguez Vivas, como directora de Juventud del Ayuntamiento, con un salario de 32,985 pesos. Además, la esposa de Rodríguez Acosta, Romina Patricia Águila, con un salario de 22,564 pesos, trabaja en la Dirección de Archivo Municipal.

Inclusive los regidores no están exentos de esta red de nepotismo, como en el caso del Cuarto Regidor, Gonzalo Calderón Poot, cuya esposa, Lisbeth Magnolia Pech Chi, trabaja como asesora en su regiduría, con un salario de 22,564 pesos, su hermano Teodoro Calderón Poot trabaja como Asistente Administrativo en la Dirección de Asuntos Jurídicos, con un salario de 17,475 pesos. Otro hermano, Esteban Calderón Poot, trabaja en la Dirección General de Servicios Públicos, con un salario de 6,902 pesos.

De igual modo, en la Quinta Regiduría, laboran dos parientes de apellido Cauich:

• Abymael Hibrahin Cauich Márquez, asistente con un salario de 13,661 pesos.
• Guadalupe Cauich Rivero, también asistente, con un salario de 17,475 pesos.

De manera lamentable el Ayuntamiento de Puerto Morelos se encuentra en medio de un escándalo sin precedentes, en donde el testimonio de trabajadores enfurecidos por los altos sueldos de los familiares y recomendados de funcionarios, pero sobre todo por el flagrante nepotismo existente decidieron sacar a la luz este grave problema. 

De acuerdo a lo que señalaron estos informantes, en el municipio de Puerto Morelos prevalece un suceso donde parientes y recomendados de alto rango apenas trabajan y, lo que es peor, maltratan al personal que sí cumple sus horarios y tareas de acuerdo a su perfil.

Por otro lado, los trabajadores también hicieron notar la existencia de una estructura paralela informal de “aviadores” quienes que a pesar de no trabajar, disfrutan de todas las prestaciones de ley, lo cual consideran una situación profundamente injusta y arbitraria.

Por lo que, la situación es aún más grave, ya que la corrupción que parece existir abusivamente no es suficiente pues los informantes denuncian una inactividad gubernamental preocupante puesto que prácticamente todos los fondos del gobierno se destinan a la nómina, dejando de esta manera unos escasos recursos para obras públicas y otras acciones gubernamentales, lo que ha generado un ambiente de ingobernabilidad y un creciente descontento ciudadano en Puerto Morelos.

Es evidente que la dimensión de este problema es evidente cuando se observan las cifras, por ejemplo en el Capítulo 1000, dedicado a “Servicios Personales”, el ayuntamiento destinó la asombrosa suma de 300 millones 678 mil 995 pesos en 2022.

Esto es un contraste abismal con los magros 45 millones 734 mil 198 pesos canalizados a obras públicas. Además, en otros rubros de gastos operativos, se asignaron 117 millones 713 mil 265 pesos para “Servicios Generales” (Capítulo 3000) y 47 millones 455 mil 621 pesos para “Materiales y Suministros” (Capítulo 2000).

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